sábado, 28 de enero de 2012


   Juan Antonio y yo teníamos previsto el domingo  22-01-12 acercarnos a Sierra Mágina y disfrutar de la nieve subiendo por algún canuto. La noche antes me comentó que nos acompañaría su amigo Luis, experto montañero y escalador, y que posiblemente cambiaríamos los crampones por material de escalada. Me alegré porque jamás realicé escalada y me seducía la idea.
Via Sol y Luna marcada en rojo: primera parte de escalada  y la segunda subida por el canuto nevado
   Nos dirigimos a Pico Jaén (2.130 m) por la carretera Huelma-Cambil tomando el camino que lleva a Mata Bejid, antiguo castillo árabe situado a la falda de Mágina. Dejamos el coche lo más cerca posible de la Peña e iniciamos la aproximación a pie. Parecía que había poca nieve y dejamos las polainas en el coche. Nos colocamos los arneses y el resto de material. Antes de llegar a la base comprobamos que había más nieve de la que creíamos.
Inicio de la aproximación a pie
    No pude tener mejor iniciación ni mejores compañeros de escalada. Luis ha subido más de cien veces este pico en sus diferentes vertientes y vías. Juan Antonio también tiene amplia experiencia en todo tipo de actividades en la naturaleza: escalada, senderismo, rafting, submarinismo... Los dos han estado en el Himalaya y en el Mont Blanc. Su experiencia y buen hacer contribuyeron al éxito y disfrute de mi primera escalada.
Preparando el equipo de escalada
   Tras las dudas iniciales de hacer el canuto central o la vía Sol y Luna Luis se decantó por esta última por ser muy bonita y estar semi-equipada con bastantes reuniones. Yo sentía intensas y diversas sensaciones.  El ir asegurado con la cuerda y los consejos de mis compañeros alejaba los posibles miedos.
La temperatura impropia de un mes de enero, la ausencia de nubes y viento, la gran visibilidad de la atmósfera y la agradable compañía conformaron un día ideal de escalada.
Llegando a la 1ª reunión con Luis
   Comenzamos trepando las primeras rampas entre nieve y roca con ayuda de manos y pies. La roca caliza era ideal para agarrarse y abundaban los pequeños salientes y diaclasas.
 Al llegar al primer largo de la via Sol y Luna, a pesar de tener un grado asequible, nos colocamos los hierros y nos encordamos. Luis subió primero para asegurar la cuerda en la primera reunión. Yo le seguí y Juan Antonio cerró la cordada recogiendo cuerda, friends y chapas.
 Juan Antonio abriendo la segunda tirada
   Luis invitó a Juan Antonio a trabajarse el segundo largo, un poco más complicado y con una sorpresa: una salida al vacío que parecía lisa y resultó tener unas presas a medida. ¡Menos mal!.
Preparado y concentrado para seguir a J. A.
Buscando presas en la roca
Sintiendo los primeros rayos de sol en la cara
Andando por la arista tras dejar a J. A. en la 2ª reunión
   Tras recoger la cuerda y demás material, subimos en ensamble (andando los tres encordados pero sin engancharnos a la roca) por la arista en mixto de roca y nieve. Procurando eludir la nieve porque estaba muy blanda y buscando el muro central de la vía.

Trepando en  ensamble entre nieve y roca
Llegando a la arista del muro central
   Ya estamos en el muro. Le comento a Luis, que con ésta es su enésima ascensión a este pico, que he observado algunas reuniones cerca de las nuestras. Me indica otras más así como los diversos nombres con los que se conocen esas vías. 
   Tenemos que soltarnos porque esta tirada es larga y la cuerda de 40 metros apenas llega para dos. Luis abre la tirada y yo le seguiré pero no me dice nada sobre el salto al vacío que tenemos arriba. Cuando llega a la reunión y asegura la tirada me avisa para engancharme. Tengo que trepar un metro en la pared vertical  porque la cuerda no me llega al mosquetón.

Según Luis aquí empieza la verdadera escalada de nivel 4
   No veo a Luis, sólo escucho las instrucciones y consejos de Juan Antonio desde abajo. Tengo que ir recogiendo friends y chapas mientras asciendo.
En pleno esfuerzo en la pared del muro. Ya pasó lo peor.
Llegando a la 3ª reunión
   Ahora le toca el turno a Juan Antonio que está esperando la cuerda al comienzo del muro. Luis tiene que bajar unos metros para ver dónde se encuentra, descolgarse y lanzarle la cuerda para que suba seguro. Además debe dar recoger una cuerda de autoprotección que olvidé recoger.
Luis descolgándose para lanzar la cuerda a J.A.
   Fue muy intensa la emoción acumulada en la subida. Las vistas eran impresionantes. Una vez terminada la pared anduvimos en ensamble por la arista  y antes de soltarnos y descender hasta el corredor o canuto central, les dí las gracias por ayudarme a realizar con éxito la escalada y compartir conmigo las sensaciones de la escalada en caliza.
Satisfecho y agradecido a mis compañeros
Descendimos del muro para bajar al Canuto
   Al atravesar el corredor nos encontramos más nieve de la esperada. Juan Antonio llegó a hundirse hasta la cintura. Luis iba abriendo huella y yo tuve que ayudarle a salir. Los bastones fueron de gran ayuda. La nieve estaba muy blanda y nos hundíamos.

Nos encontramos mucha y profunda nieve polvo en mitad del canuto
Ayudando a J. A. a salir de la nieve
Siguiendo la huella de Luis
Luego fuimos buscando el margen izquierdo para agarrarnos a la roca.
  Huella reciente de un grupo anterior
Final del corredor
Pasamanos de cuerda en el tramo más complicado del corredor
Detrás de nuestro material se aprecia Sierra Nevada
Luis J. Landa, Juan A. Moreno y yo